Ponernos un calzado de una dimensión acorde al tamaño de nuestros pies nos parece una cuestión de sentido común para que nuestro cuerpo esté en equilibrio a cada paso que damos. Sin embargo, cuando se trata de nuestra huella ecológica hay una desproporción de una envergadura que supera con creces el tamaño razonable por persona. Así, no es de extrañar que el planeta no se sostenga en pie y pida a gritos climáticos una conciencia de freno de este derroche, un zapato de CO2 a su medida, cuya huella lo mantenga estable.
EL HABITAR ACTUAL DEJA MELLA
En el mundo occidental, la huella ecológica ronda las 11Tn CO2/persona/año. Si fuésemos equitativos a nivel planetario nuestras emisiones de gases invernadero deberían estar a niveles aproximados de 2,5 Tn CO2/persona/año, con el fin de evitar el aumento del calentamiento global y la contaminación atmosférica.
De estos datos de despilfarro ambiental la edificación supone un 40% del total. La generación de electricidad, calefacción de las casas, transportes a larga distancia, elaboración de artículos en fábricas y tratamiento de residuos son, entre otras, las actividades que más emisión de CO2 generan, todas ellas relacionadas con la creación y el uso del hábitat.
Las prácticas arquitectónicas y urbanísticas, además las emisiones mencionadas, originan un consumo material y energético que, en un porcentaje que supera con creces la mitad del disponible, tienen como consecuencia una crisis de la biodiversidad, un agotamiento de recursos, una disminución de la salud humana y planetaria, muchas "guerras de combustibles" y un sin fin de etcéteras.
La alarma de la Tierra aumenta de decibelios cuando, al observar un mapamundi, podemos ver claramente como la repartición de recursos y emisión de residuos está mal distribuida y en desigualdad. Debemos ser conscientes de que no podemos estar hablando de un desarrollo sostenible cuando en él queda excluido gran parte de la humanidad.
Con todo esto, queda bastante claro que para conseguir regular el desgaste del planeta hacen falta nuevos hábitos de generar espacios vivibles y plantear actitudes sociales, adaptados a los recursos y necesidades del medio natural, y de una forma equitativa a nivel geográfico y cultural.
SOSTENIBILIDAD. ESTRATEGIAS EN CLAVE DE RE
Una práctica arquitectónica sostenible conlleva un cambio de estrategia, unos cimientos de planteamiento que aseguren el equilibrio global a nivel humano y medioambiental, con unas bases claves como :
REcondiserar la calidad de vida individual y urbana
REvalorar la biodiversidad
REducir la demanda energética mediante el aprovechamiento de las cualidades del entorno, la generación de residuos, el consumo de agua durante el uso del edificio, las geopatologías, el impacto ambiental, la distancia de transporte de los materiales de construcción (km 0)...
REutilizar materiales o estructuras que puedan seguir realizando su misma función en otra edificación.
REciclar elementos para proporcionarles un nuevo uso, disminuyendo los residuos y el consumo.
BIOCONSTRUCCIÓN : LA HORMA DE NUESTRO ZAPATO PLANETARIO
Contribución de la bioconstrucción a una atmósfera con menos CO2
Pensar la arquitectura a partir de los instrumentos que la naturaleza nos proporciona es una de las claves para lograr un equilibrio planetario por diversos motivos:
Se trata de una construcción que se nutre de materiales cercanos o de km 0, reduciendo así la contaminación por el transporte de los materiales al lugar de la edificación.
Los materiales utilizados tienen una huella ecológica nula e incluso positiva. Suelen ser materiales de origen animal, vegetal o mineral que no contienen químicos, a diferencia de lo que suele ocurrir en los sistemas convencionales. Algunos de ellos contribuyen incluso a la absorción de CO2, aumentando así la calidad medioambiental.
El tratamiento de los materiales es bajo o nulo a nivel industrial, por lo que se reduce la emisión de gases invernadero que supone el proceso de elaboración en fábrica.
Las cualidades intrínsecas de los materiales (inercia térmica, porosidad, aislamiento, resistencia a la humedad...), junto con la correcta utilización de las energías ambientales (sol, viento, geotermia, orientación...), contribuyen a una mejor calidad energética y a una reducción de la explotación de combustibles fósiles.
Los materiales o sistemas constructivos pueden ser reutilizados en nuevas construcciones, reduciendo la producción y el consumo desmesurado.
El impacto generado por la demolición de edificaciones realizadas con bioconstrucción es sobradamente menor que el de los sistemas convencionales actuales.
Es una práctica que fomenta la biodiversidad, favoreciendo los diferentes procesos evolutivos de los seres vivos, en equilibrio con el entorno, y que evita que el hábitat humano afecte al deterioro medioambiental de una forma tan desmesurada como la presente.
El cambio climático, que se ha convertido en una rutinaria alerta de la Tierra con sobrenombres como agotamiento de recursos, efecto invernadero, calentamiento global, contaminación atmosférica, y cuyos actores principales son, entre otros, los relacionados con el hábitat humano, hace que resulte lógico y necesario declinarse por un sistema constructivo basado en la armonía con la vida del planeta, el cual, como hemos visto en la opción bioconstructiva, reduce el impacto de todas estas consecuencias naturales.
Para que el cambio de huella ecológica sea significativo, a las alternativas constructivas sostenibles habría que sumarle unas prácticas humanas de habitar en consonancia con el medio, que dejen una mella acorde con el tamaño de que lo que cada vida ocupa en el planeta. ANEXOS:
CÁLCULO DE TU HUELLA DE CARBONO, para mirar qué pisan tus hábitos: http://calculator.carbonfootprint.com/calculator.aspx?lang=es
LIBROS RECOMENDADOS (enlaces para descargar o leer online) :
X un buen clima. Calculadora de carbono. Una guía de acción contra el cambio climático http://cads.gencat.cat/web/.content/Documents/Publicacions/x_un_bon_clima._calculadora_de_carboni.pdf
34 Kg de CO2 Toni Solanas, Dani Calatayud, Coque Claret http://www.arquilecturas.com/2013/01/34-kg-de-co2.html
ASOCIACION ECÓMETRO: mide y visualiza los impactos de la arquitectura y el urbanismo sobre la Tierra, sobre los ecosistemas y la salud humana.